El presidente de Perú, Pedro Castillo, llegó al poder con “toda la legitimidad democrática” y por tanto contará con “todo el apoyo y consideración” de la Unión Europea (UE) como líder del país andino, reafirmó este martes en Lima el alto representante para la Política Exterior comunitaria, Josep Borrell.
El alto funcionario se expresó así durante un encuentro con medios extranjeros en Lima con motivo de su visita al país, su primer desplazamiento a América Latina desde que asumió el cargo como jefe de la diplomacia europea, en coincidencia con los 100 días de Gobierno de Castillo.
Borrell reafirmó el apoyo europeo a todos los gobiernos surgidos de “procesos democráticos y de los que son elegidos democráticamente” e insistió en que, pese a las críticas de los sectores opositores derrotados en los comicios presidenciales de junio pasado, “el presidente Castillo” llegó al poder de forma “impecable” y “legítima”.
El representante exterior del bloque continental abordó así la situación política que vive el país desde que Castillo obtuviera el triunfo en unas contestadas y polarizadas elecciones ante Keiko Fujimori, la hija y heredera política del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), acusada de lavado de activos. Castillo se impuso por un escaso margen de votos en la segunda vuelta electoral el pasado 6 de junio, lo que llevó a Fujimori y varios grupos opositores de derechas a denunciar sin prueba alguna la existencia de un supuesto “fraude electoral”.
Esas denuncias ralentizaron la proclamación del triunfo de Castillo, que solo fue aceptado en última instancia por los derrotados en los comicios, que desde entonces no han dejado de insistir en la “ilegitimidad” de Castillo como presidente. “Es evidente que Perú pasa por circunstancias políticas excepcionales, pero también debo señalar que el cambio en la presidencia de la República y la elección del nuevo presidente se ha celebrado de una manera que podemos calificar de modélica desde el punto de vista procedimental”, dijo Borrell.
En ese sentido, el político español recordó que la misión de observación europea que vigiló los comicios reconoció que los mismos se realizaron “de una forma perfectamente impecable y sin irregularidades dignas de mención”.
“Ciertamente el resultado ha sido muy ajustado, y eso ha obligado a realizar recuentos y atender las reclamaciones que han hecho otros candidatos, pero el resultado es perfectamente legítimo desde nuestro punto de vista, no hay nada que objetar. Las elecciones se ganan o pierden en función de quien saca más votos.
La diferencia ha sido pequeña, pero ha sido la que es y eso ha investido a Castillo”, dijo. Borrell consideró que su visita al país en este momento es “especialmente propicia” dado la “importante” renovación de autoridades en un país como Perú, muy vinculado a Europa y en particular a España en un momento donde se encuentra “en el inicio de una nueva época política”.
En ese sentido, indicó que su visita servirá también para “conocer bien cuáles son los planteamientos políticos” y la forma con la que el nuevo Gobierno peruano desea encauzar las relaciones bilaterales. “Nos interesa conocer la situación de Perú, cuál su programa, sus intenciones… A todo el mundo hay que juzgarlo por sus actos, sus hechos.
El viaje es una excelente ocasión para conocer de primera mano de qué manera el presidente Castillo pretende abordar los problemas que tiene el país”, dijo Borrell. De este modo, el diplomático europeo subrayó que su presencia en Lima no es solo de buena voluntad o de reconocimiento, “que lo es”, sino también mira “hacia de qué manera podemos los europeos contribuir a la estabilidad del país y su progreso y su bienestar económico”.